Tailandia y Singapur día 6
Chiang Mai día 1
Vuelo Bangkok-Chiang Mai. Ciudad antigua, Night Bazaar y mercado de Anusarn
5 DE MARZO DE 2019
A las 6:15 estábamos en pie, con tiempo para el último desayuno en la terraza del Club Lounge. Nos despedimos de la camarera que nos había atendido estos días y que era majísima, y bajamos a por el transfer. Nos llevaron en un Prius espectacular al aeropuerto. Tardamos una hora aproximadamente, y eso que había poco tráfico. El chófer nos dijo que si hubiésemos salido 15 minutos más tarde probablemente nos hubiera costado media hora o cuarenta y cinco minutos más el recorrido. Tenedlo en cuenta si vais en coche al aeropuerto de Suvarnabhumi.
A pesar de haber mucha cola para facturar, iba bastante rápido, igual que el arco de seguridad. A las 8:15 estábamos sentados en la sala de espera de Bangkok Airways. Tienen una sala como ésta en cada aeropuerto de Tailandia al que vuelan, y te dan café, zumos, agua, bollería, algún snack salado y wifi, totalmente gratis. Son unas salas con asientos muy cómodos y llenas de enchufes. No dudéis en volar con esta compañía, ¡nos encantó!

Embarque y despegue en hora, 9:40 en punto, y a mitad de camino nos dieron más comida… Nos debieron ver cara de hambre. Sandwich de pollo y queso con agua y café o té. A las 11:05 aterrizamos en Chiang Mai, recogimos las maletas y en la puerta nos esperaba una furgoneta del hotel Villa Sirilanna para recogernos. En el recorrido ya nos dimos cuenta que la ciudad es muy pequeña y menos caótica que Bangkok, aunque el calor es el mismo.
El hotel está en el centro de la ciudad, dentro de las murallas, tiene piscina y desayuno incluido. Durante el check-in nos ofrecieron un zumo de fruta muy dulce, como un licor, pero de muy buen sabor. La habitación era de tipo colonial, toda de madera de teca y espacios muy grandes. Desempaquetamos un poco y nos fuimos a dar el primer paseo. Entre unas cosas y otras se nos hizo la hora de comer, así que nos dirigimos al norte, para probar un bar recomendado por Mark Wiens.

Las calles estaban llenas de tuk-tuk, mucho menos insistentes que en Bangkok, y de songthaew, una especie de furgonetas que funcionan como taxi compartido/minibuses (os explicamos todo sobre el transporte en la entrada cómo moverse en Tailandia). La casas son de 2 ó 3 alturas como mucho y hay bastante vegetación, algo totalmente diferente a lo que habíamos visto hasta ahora.
Comimos en Lert Ros, que por cierto, también lo recomienda Lonely Planet. Tienen tilapias asadas en sal típicas de la zona. Pedimos una para probarla, son de 750g/1kg aproximadamente, un plato de cerdo a la brasa y dos Chang grandes. Todo nos costó 350 baths/9,5€. Teniendo en cuenta que cada cerveza era de 2/3 de litro nos pareció un precio increíble. El pescado estaba muy jugoso y sabroso, y el cerdo nos recordó a los torreznos aunque con un toque ahumado. 100% recomendable.

Vimos una cafetería con vaporizadores y ventiladores en la terraza llena de sombrillas y decidimos tomarnos un café frío y refrescarnos a la sombra. En esta zona de Tailandia hay muy buen café y el que tenían aquí era orgánico, o eso decían. La verdad es que estaba muy bueno, servido en un vaso enorme y muy muy frío, por 70 baths/1,8€.
Al salir recorrimos la calle Sripoom Rd hacia el oeste. Entramos en Wat Pan On, un templo rojo y dorado con unan gran pagoda (entrada gratuita); pasamos por el Lanna Architecture Center, una casa de estilo lanna convertida en museo, y el Wat Phantao, donde nos detuvimos más rato (entrada gratuita). Es un templo de madera con una gran buda dorado, nos gustó mucho porque no es muy recargado. Aprovechamos que no había nadie para hacer algunas fotos y grabarnos haciendo alguna ofrenda.
En la puerta había un hombre muy amable que nos dijo que al día siguiente se celebraba una boda por si queríamos ir a verla. Al principio nos dio la impresión de que quería vendernos algo, pero sólo quería ser simpático y charlar. Esta debe ser la amabilidad tailandesa que habíamos leído y no habíamos visto en Bangkok.

A pocos metros había otro templo más grande, el Wat Chedi Luang (entrada 40 baths/1,10€). Tiene varias edificaciones y un árbol centenario muy famoso, el Lak Meuang, además, en la parte trasera hay un chedi enorme que le da nombre al templo (y que nosotros no vimos ese día, volveríamos una mañana con mejor iluminación). Como hacía calor entramos al edificio principal y nos quedamos un rato viendo a los jóvenes monjes hacer sus oraciones frente al gran buda (uno de los imprescindibles que ver en Tailandia es recorrer algunos de los más de 300 templos de Chiang Mai).
A las 15:45 volvimos al hotel, intentamos darnos un baño pero el agua estaba bastante fría y a esas horas ya no daba el sol en la piscina, así que nos tumbamos un rato en las tumbonas donde corría el aire y descansamos hasta que atardeció.

Una de las atracciones más famosas de Chiang Mai son sus mercados nocturnos, suelen abrir una vez se ha puesto el sol, así que a las 18 nos fuimos hacia el más famoso, el Night Bazaar de Chang Khan. Salimos del hotel hacia el este, pasando las murallas y recorriendo la calle Loi Kroh Rd, repleta de locales de masajes tailandeses con pinta de «final feliz» y bares llenos de prostitutas. Había hasta una pizzería con luces de discoteca y un montón de chicas y ladyboys.
El mercado nocturno empieza en el cruce de la misma calle con Chang Khlan Rd, y se extiende de norte a sur varias manzanas. En los laterales de la calle hay mercados interiores enormes que llegan hasta las siguientes calles. Nosotros fuimos primero hacia el norte, pero los mercados interiores todavía los estaban montando así que cambiamos de rumbo y llegamos hasta el mercado de Anusarn, que se abre a la izquierda si vas en la dirección sur. Durante todo el recorrido por la calle hay miles de puestos a uno y otro lado, así que cuando llegamos no nos creíamos que aún hubiese más allí dentro, es bastante grande y hay una zona con puestos de comida.

Habíamos recorrido todo el recinto y comprado un par de encargos, algunos palillos de coco y otros souvenirs, así que tocaba reponer fuerzas. Pensando en los horarios de Bangkok cenamos a las 20:00, pero en Chiang Mai ofrecen comida hasta más tarde, vimos a gente cenar hasta las 23:00 de la noche.
Elegimos un restaurante que tenía expuesto el pescado y el marisco en muy buenas condiciones y con buena pinta. Nos sentamos a cenar y acabamos pidiendo pollo asado y pollo picante con albahaca, y eso que lo que nos había llamado la atención era el pescado, jeje. Lo acompañamos de 2 Singha grandes y un plato de arroz blanco. La cuenta fue de 570 baths/15€. El pollo asado estaba muy bueno, para repetir.

Al acabar de cenar, volvimos a recorrer la calle hacia el norte, ahora sí estaban abiertos los mercados interiores. Aunque estaba a rebosar de puestos, no había mucha gente paseando, al menos no tanta como sería de esperar viendo lo grande que es el mercadillo. Por si alguien se espera otra cosa, como le pasó a Rafa, es un mercado de souvenirs enfocado al turismo exclusivamente, y en los puestos de comida normalmente no se ven tailandeses, sólo turistas.
Al final de la calle, antes de llegar a Thapae Rd, hay un mercado a la izquierda si vais dirección norte. Ploen Ruedee es un mercado al aire libre lleno de farolillos de colores y con una zona central llena de bancos de paja y un escenario en el que estaba tocando un grupo de rock. Los laterales están llenos de puestos de venta y al final hay unos cuantos puestos de comida. Nos recordó al mercado de Ratchada (nuestro favorito en Bangkok). Nos encantó y decidimos que al día siguiente vendríamos aquí directos.
A las 22:20 emprendimos el camino de regreso al hotel. En la calle Loi Kroh fuimos «asaltados» cada poco por alguna mujer ofreciéndonos masajes tailandeses y fingiendo llorar cuando decíamos que no, fue a la vez desagradable y divertido.
