Milán día 4
Paseo por Milán · Regreso a Valencia
9 de octubre de 2016
Nos despertamos a las 9:00, otro día sin madrugón, benditas vacaciones. Desechado el plan de ir a pasar el día a Bérgamo por culpa de la lluvia, decidimos acabar de recorrer Milán. Allí no llovía casi. Desayunamos tranquilamente y a las 10:15 ya estábamos haciendo el check-out.
Bajamos por Vía Monte Napoleone, viendo los corredores de la media maratón que había esa mañana por las calles de la capital lombarda. Callejeando hacia el cuadrilátero de la moda encontramos un mercado de pintores locales, muy chulo, había verdaderos artistas y otros que, a nuestro inexperto juicio, eran muy malos.

Después de patear el centro buscando algún imán para llevarnos y no encontrar ninguno que no fuese excesivamente hortera, nos dirigimos a Brera, nuestro barrio preferido. Entramos de casualidad en la Pinacoteca (íbamos buscando un baño), las salas estaban cerradas, estaba abierta para los estudiantes, al parecer nos habíamos colado sin querer.

Comimos muy cerca del hotel, en el restaurante Camillo Benso, una melanzane alla parmigiana, pacchetti al ragú, tagliatelle al funghi y el último tiramisú del viaje. La cuenta subió a 55€ con agua para beber.

Nos sentamos un rato en el hall del hotel a tomar un café y a hacer algo de tiempo antes de coger el autobús al aeropuerto. Fuimos en metro desde la parada Turati hasta la estación central, donde estaba la parada de los autobuses (os explicamos todas las opciones en la entrada cómo ir del aeropuerto a Milán).
Llegamos a las 16:30 al aeropuerto de Bérgamo, tras una hora de viaje, y buscamos una mesa cerca de los ventanales para esperar cómodos el embarque. El control de seguridad lo habíamos pasado volando gracias al fast-track que incluían los billetes. Desde el aeropuerto veíamos la bonita Città Alta de Bérgamo, que hubiéramos podido visitar de no ser por la lluvia.


El embarque fue rápido, los billetes de priority esta vez sí valieron la pena. Despegamos en hora y llegamos a Valencia casi con 20 minutos de adelanto.
En nuestra cabeza ya estaba organizándose la próxima visita a Italia (en mayo del siguiente año haríamos una ruta de 10 días por la Toscana).
